Cómo preparar Boquerones al limón crujientes y fáciles
Cómo preparar Boquerones al limón crujientes y fáciles
¿Quieres disfrutar de unos boquerones frescos, crujientes y llenos de sabor en casa? Esta receta es perfecta para un fin de semana o una comida especial. Además, se puede preparar con antelación y te sorprenderá lo sencilla que es. ¡Vamos a ello!
(Cantidades para 4 – 5 personas)
750 gr. Boquerones Limpios
250 gr. Harina Trigo todo uso
1 Huevo (M)
250 ml. Líquido c/gas (uso cerveza)
1 Cucharadita Cúrcuma en polvo
1 Cucharada Perejil Picado
Sal y Pimienta
FRITURA
Aceite Oliva suficiente
2 Dientes de Ajo
Empieza comprando boquerones grandes, frescos y hermosos en el mercado. Pide que te los limpien, quitándote trabajo. En un bol con agua fría, añade dos cucharadas de sal y hielo para limpiar los boquerones y mantenerlos tersos y duros.
Con cuidado, pasa el dedo por la espina central del boquerón para quitarla, abriéndolo como si fuera una mariposa. Retira la espina central con cuidado sin cortar la colita; y deja los lomos abiertos en el agua salada. Repite con todos los boquerones. No tires las espinas; fríelas pasadas por harina para hacer crujientes snacks.
Deja los boquerones en la salmuera durante unos 10 minutos. Esto ayuda a que queden más firmes y sabrosos. Mientras tanto, prepara el rebozado.
En un bol, mezcla harina de trigo con una pizca de sal. Añade un huevo, ralladura de limón lavada, zumo de medio limón sin quitar las pipas (que no molestan) y una cucharadita de cúrcuma para dar color y sabor.
Incorpora poco a poco un líquido con gas (puede ser cerveza, sidra o gaseosa) mientras remueves hasta obtener una crema fina, sin grumos. La textura debe ser similar a una bechamel ligera.
Calienta abundante aceite en una sartén con unos dientes de ajo machacados para aromatizarlo. Cuando el aceite esté caliente (pero sin humear), seca bien los lomos de los boquerones con papel absorbente.
Pásalos por harina ligeramente, luego sumérgelos en la masa rebozada y fríelos en pequeñas tandas para que no baje mucho la temperatura del aceite. Fríe unos minutos por cada lado hasta que estén dorados y crujientes.
Coloca los boquerones en papel absorbente para eliminar el exceso de grasa. Sirve calientes o templados, acompañados de unas rodajas de tomate fresco o un toque de limón exprimido por encima. Decora con perejil fresco para dar color y frescura.
¡Y listo! Ahora solo te queda disfrutar de estos deliciosos boquerones al limón crujientes, perfectos para cualquier ocasión especial o simplemente para darte un capricho en casa. ¿Te animas a prepararlos? ¡Seguro que te quedarán espectaculares!
Y una cosa más: Ya verás que Calientes o Fríos son un vicio delicioso; ya contarás…
Guille
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